martes, 25 de enero de 2011

Una boda Musulmana


A diferencia del resto de bodas mundiales, la boda musulmana dura alrededor de tres o cuatro días(parecido a las bodas gitanas). La cultura árabe tiene ideas bastante diferentes a las nuestras, por eso nos resultará una boda menos parecida a la nuestra.
En la ceremonia las mujeres están separadas de los hombres, dado que el hombre tiene un papel más importante que la mujer. Además, un hombre puede casarse con varias mujeres pero, para ello, tiene que mantenerlas a todas por igual.
Antes de producirse el enlace, todos los invitados deberán de acudir a unos baños llamados Haman, donde se purificarán con el agua. No hay que olvidar que son matrimonios por conveniencia y que las novias no tienen ni voz ni boto para opinar sobre su futuro prometido. Son muy pocas aquellas que se atreven a saltarse la norma religiosa. No son costumbres antiguas, hoy en día más de la mitad de la población sigue la tradición.
Preparan a la novia en todos los aspectos. La madre se encarga de buscar a modistas, cocineras, peluqueras, maquilladoras, bordadoras y decoradoras para que la ayuden a habituarse en su nueva vida. Las mujeres tienen que abarcar todas las tareas de casa, está prohibido que el hombre haga algo. Su idea es madurar.
El primer día de boda, el novio ofrece para comer a la novia dátiles y leche para beber, y lo mismo pero al revés. Es un tópico de allí. Si bien es cierto, la novia tiene el papel más importante en ese día, por eso, su casa está abierta de par en par para todos aquellos que la quieran visitar.
Cuando finaliza el banquete el novio llega con un caballo blanco y lleva a la novia a su casa. En la misma noche, llamada la noche de bodas, son los amigos del novio la que la recogen y la llevan a casa de sus suegros con el objetivo de seguir la fiesta todos juntos. Allí el novia la está esperando y le lee un poema que culmina con un beso en la frente.
Los musulmanes son muy cuidadosos con el manjar y le dedican muchísimo tiempo para que todo esté perfecto (muchas pastas dulces y tanyis). Aunque está prohibido beber alcohol en la cultura árabe, se lo pasan muy bien.

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